







Autoridades del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS), acompañados por personal de Recursos Hídricos, Defensoría del Pueblo y Municipalidad de Neuquén, realizaron este martes una inspección en el canal Leguizamón, luego de la denuncia de una funcionaria del ejecutivo local que acusó al EPAS por una “descarga clandestina” de líquidos cloacales, y constataron que no existe tal vertido irregular e intencional.
El Gerente General del Servicio Neuquén, Esteban Rodríguez, junto a personal técnico operativo del Ente, ingresaron a las cámaras del canal pluvioaluvional con la subsecretaria de Medioambiente de la Municipalidad, Silvia Gutiérrez, y comprobaron que había una mancha de color verdoso que provenía del suelo de la cámara: “Está claro que no hay ningún caño ni descarga ni abertura intencional que derive líquidos del colector cloacal Lanín al pluvial, como dijo la semana pasada la subsecretaria”, expresó Rodríguez y detalló que “la filtración que se ve probablemente sea por una rotura tanto del colector como del canal pluvial que filtra del primero al segundo y viceversa”.
Cabe recordar que el canal Leguizamón fue construido con posterioridad y por sobre el colector cloacal por lo que se estima que la rotura sea producto de la presión que ejerce la cámara de acceso que es de hormigón y de gran tamaño. El EPAS solicitó al Gobierno de la ciudad los planos de la obra para constatar que la misma se haya ejecutado garantizando la durabilidad de la colectora que cruza por debajo. De comprobarse que esto no haya sido así, se solicitará al Municipio que se resposabilice de la reparación para evitar estas filtraciones ya que el agua del pluvial que ingresa a la redes cloacales también perjudica notablemente al servicio, aumentando los caudales del líquido apto para transportar, lo que provoca desbordes, y sacando de régimen las plantas de tratamiento.
“Esta inspección conjunta con todos los integrantes de la comisión que aborda la contaminación del arroyo Durán es lo que debió hacerse en primera instancia y evitar así conjeturas equivocadas sobre vertidos irregulares por parte del EPAS”, agregó el gerente del servicio.
Asimismo, se aprovechó la ocasión para inspeccionar cámaras aledañas y, en la intersección de calles Leguizamón y Guiñazú, la empresa provincial asistió al Municipio con su camión desobstructor para limpiar el pluvial de objetos pesados, grasa, etc.